La Cruz Roja de Cataluña atiende cada año a un total de 50.600 personas mayores de 65 años, ya sea en programas para la tercera edad o para personas dependientes, como el servicio de teleasistencia, las ayudas a domicilio o las actividades de participación comunitaria.

Según ha informado la organización, en lo que va de año ha atendido además a 1.615 ancianos en proyectos específicos de lucha contra la pobreza, según datos facilitados por la entidad humanitaria con motivo de la celebración hoy del Día Mundial de la Gente Mayor.

Paradójicamente muchas de las atenciones que la Cruz Roja presta a personas jubiladas están protagonizadas también por voluntarios mayores de 60 años, que representan ya un 11 por ciento del total de los casi 17.000 voluntarios de esta ONG.

Los responsables de la Cruz Roja de Cataluña han destacado que el colectivo de ancianos es cada vez más numeroso y con realidades muy diversas por el aumento de la longevidad.

Los voluntarios de la entidad se encuentran cada vez más con ancianos con un papel más activo en la sociedad, pero también hay muchos que son personas muy vulnerables, ya sea por su estado de salud o por sus precarias pensiones.

La Cruz Roja ha diseñado varios programas de ayudas a las personas mayores que van desde el apoyo a domicilio hasta actividades de participación o servicios de atención, como el localizador SIMAP para personas con demencia leve o moderada o la tele-asistencia domiciliaria.

Debido a la crisis, la Cruz Roja ha puesto en marcha una campaña para facilitar el acceso a la teleasistencia a los ancianos con dificultades sociales o económicas, abaratando el coste de alta del servicio.

Actualmente, la Cruz Roja de Cataluña cuenta con 16.984 voluntarios y voluntarias, de los que 1.875 tienen más de 60 años. EFE.