La temporada de invierno está cerca y con ella se incrementa el riesgo de enfermarse de las vías respiratorias o adquirir enfermedades invernales como la influenza. Por ello, la Secretaria de Salud de Michoacán continua con la aplicación de vacunas contra la influenza con el objetivo de proteger a los niños y adultos mayores que son la población más susceptible a enfermarse.

Desde el pasado 10 de octubre la SSM inicio la aplicación de la vacuna contra la influenza para proteger a la población más vulnerable como son los niños 6 a 23 meses de edad, así como a personas con enfermedades respiratorias crónicas. En total se aplicarán 266,060 dosis de vacuna contra la influenza.

Como es sabido, la influenza es una enfermedad viral transmisible que afecta a la nariz, la garganta y los pulmones. Se transmite de persona a persona a través de los estornudos, la tos, los saludos de mano o incluso al hablar, a través de las gotitas de saliva. Las manifestaciones aparecen repentinamente y puede provocar los siguientes síntomas: fiebre alta, dolor de cabeza, fatiga o cansancio, que puede llegar a ser extremo; tos seca, dolor de garganta, escurrimiento por nariz y dolor muscular. Estos síntomas se presentan con mayor intensidad que en las gripas o catarros comunes.

La mayoría de las personas con influenza se recuperan en una o dos semanas, pero algunos individuos especialmente vulnerables pueden desarrollar complicaciones, como la neumonía, que pueden provocar incluso la muerte. Los grupos con mayor riesgo de sufrir estas complicaciones son los niños de 6 a 23 meses de edad y los adultos mayores.

El año pasado ya se aplicaron vacunas contra esta enfermedad a los niños de 6 a 23 meses de edad, los cuales recibieron dos dosis del biológico, aplicadas con 4 semanas de diferencia. Por ello, señaló que los menores incluidos en este rango de edad que ya fueron vacunados, este año sólo necesitan una dosis. Sin embargo, aclaró que los que no fueron vacunados entonces, y por su edad no han tenido contacto con el virus, deberán recibir dos dosis del biológico, con un intervalo entre ambas de un mes.

MEDIDAS CONTRA LAS INFECCIONES RESPIRATORIAS

Además de la vacunación existen otras medidas sencillas que la población puede adoptar para disminuir el riesgo de padecer infecciones respiratorias, así pues, se recomienda evitar los cambios bruscos de temperatura, abrigarse al salir a la intemperie, especialmente durante las primeras y las últimas horas del día, evitar los niños caminen descalzos, y cuidar que los adultos mayores sigan estos consejos.

Por otra parte, es aconsejable incrementar el consumo de alimentos ricos en vitamina C, como las naranjas, toronjas, mandarinas y guayabas, así como beber abundantes líquidos tibios, como infusiones o caldos.

También es conveniente evitar en la medida de lo posible los lugares muy concurridos, así como evitar saludar de mano, ya que se incrementa el riesgo de contraer una infección. El lavado de manos es importante no solo para evitar las enfermedades gastrointestinales, sino también las respiratorias, por lo que es recomendable lavarse las manos frecuentemente y especialmente después de ir al baño y antes de comer o de preparar alimentos.

Si algún miembro de la familia se enferma se debe acudir lo mas pronto posible a la unidad de salud mas cercana. Se debe tener especial precaución en los niños y adultos mayores, permaneciendo alerta ante los signos de alarma que pueden indicar una complicación. Los signos son: respiración agitada o dificultad para respirar, hundimiento en el pecho, decaimiento general, pérdida de las ganas de comer, fiebre durante más de tres días y ruidos en el pecho.

Ante cualquiera de estos síntomas es necesario evitar la automedicación y acudir con el médico de confianza.