Recortes afectarían gravemente a los ancianos enfermos

The Miami Herald

24 de febrero de 2009

Para José Rodríguez, la visita dos veces al día de un asistente médico es una bendición divina. El tenedor de libros retirado cuida a su esposa Ana desde 1999, cuando le diagnosticaron el Mal de Alzheimer. Esas visitas son su único respiro de un trabajo de 24 horas.

''Yo no puedo ocuparme de mi esposa solo'', afirma Rodríguez, de 70 años y vecino de Miami. ``No camina. No habla. Y necesita dos personas para que la muevan. Hacer eso solo es una misión imposible''.

Sin embargo, Rodríguez podría perder pronto esa ayuda. Los legisladores han reducido 4 por ciento al presupuesto de $13.3 millones de la Iniciativa para el Mal de Alzheimer, que ofrece asistencia a domicilio a las personas que, como Rodríguez, cuidan de sus familiares enfermos. Los legisladores redujeron fondos a otros programas durante el período especial de sesiones de enero, pero el gobernador Charlie Crist vetó las reducciones al popular programa de Cuidados Comunitarios a los Ancianos y limitó otros a 2 por ciento.
 
Ahora se esperan más reducciones --tal vez hasta de 15 por ciento, en dependencia de los pronósticos de ingresos-- cuando la Legislatura vuelva a reunirse el 3 de marzo.

''Este año será duro. Tenemos menos dinero, de modo que todos recibirán menos'', dijo el representante republicano Marcelo Llorente, jefe de presupuesto de la Cámara que supervisa los gastos de salud.

Los defensores de los ancianos advierten que miles de personas mayores en la Florida quedarán sin servicios, desde cuidados diurnos hasta comidas gratis. ''Lo que hemos dicho es que no se puede continuar reduciendo estos programas sin afectar considerablemente a la población'', dijo Leslie Spencer, cabildero de AARP en Tallahassee.

``Para muchos es una situación de vida o muerte''.

''Nuestra lista de deseos para este año es decididamente modesta'', dijo Jon Peck, portavoz del Departamento de Asuntos de Ancianos de la Florida. ``Nuestra esperanza es mantener el nivel de los servicios. Reconocemos la realidad de la crisis económica''.

Ahora los defensores de los ancianos han centrado sus esfuerzos en salvar algunos de los programas, cambiando la manera en que se ofrecen los servicios a largo plazo y brindando alternativas de financiamiento aceptables:

• Los defensores de los ancianos quieren impedir las reducciones a Cuidados Comunitarios a los Ancianos, la Iniciativa para el Mal de Alzheimer y otros programas que brindan ayuda a domicilio con comidas, servicios de higiene, transporte y otros servicios. Con estos programas, los ancianos pueden vivir en su casa en lugar de una institución, lo que significa ahorros considerables. El Concilio de la Vejez de la Florida calcula que el costo promedio de los servicios del programa es $4,680 por persona, financiados enteramente por el fondo general de ingresos del estado. Los servicios en instituciones cuestan $65,251 al año, en su mayor parte provenientes de fondos federales.

• Reforma del Medicaid. Muchos ancianos que participan en un programa experimental de dos años del Medicaid en cinco condados, entre ellos Broward, se han quejado de el nuevo sistema demora mucho conseguir una cita con el médico. Los defensores de los ancianos no quieren ampliar el programa hasta que tengan información independiente para evaluar su efectividad.

• Financiamiento alternativo. Para los ingresos a las arcas estatales, los defensores de los ancianos han propuesto aumentar el precio de los cigarrillos en $1 por cajetilla, que se calcula generaría $1,000 millones este año fiscal. También han solicitado a los legisladores que estudien la posibilidad de gravar las ventas en internet ($3,000 millones más) y ampliar el impuesto a las ventas (otros $1,000 millones).

''Estamos usando un método doble'', explica Spencer, de la AARP, que ha unido fuerzas con otras organizaciones, como Florida Tax Watch y Children's Home Society, para ofrecer propuestas que generen ingresos. ``No estamos pidiendo simplemente que no reduzcan los fondos, sino que hemos propuesto alternativas de ingresos''.

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