Día a día se conocen casos dramáticos de adultos mayores a quienes, tras una deuda impaga, se les rematan sus pertenencias o casas, dejándolos, en muchas ocasiones, en el más completo desamparo.

Para evitar situaciones como éstas, el senador Juan Pablo Letelier presentó un proyecto de ley que establece la inembargabilidad de determinados bienes muebles que pertenezcan a personas de la tercera edad.

La iniciativa, que debate la comisión de Constitución del Senado, plantea modificar el Código de Procedimiento Civil para establecer la inembargabilidad de ciertos bienes pertenecientes a adultos mayores, para no dejarlos desamparados, pues por su edad, es muy difícil que puedan recuperar los bienes de primera necesidad que puedan ser embargados y posteriormente rematados. Para superar esta situación, Letelier propone que los hombres de 65 años o más y las mujeres de 60 años o más, no podrán sufrir el embargo del inmueble destinado al uso o habitación, salvo que éste supere las 2.000 UF ($36 millones aproximadamente) de su avalúo fiscal.

Asimismo, electrodomésticos como lavadora, refrigerador, televisor y equipos de música o radios en general, sólo podrán embargarse si el deudor tiene más de uno de ellos y, en ese caso, se embargará el de menor valor. Los bienes muebles que componen el living y el comedor serán siempre inembargables, señala el proyecto.

Letelier señaló que al establecer un régimen especial de inembargabilidad para los adultos mayores, “estaremos protegiendo a quienes adquieran bienes en una cantidad superior a sus posibilidades de pago, limitando la posibilidad de que estas personas queden en condiciones económicas precarias producto del sobreendeudamiento que puede afectarlas”.

Las cifras
Según el censo de 1992, las personas mayores de 60 años constituían el 9,8% de la población chilena. Diez años más tarde, el 2002, este porcentaje subió al 11,4%, de los cuales el 10,2% son hombres y el 12,5% son mujeres.
En el 2002 los adultos mayores llegaron a 1.717.478. 959.429 son mujeres y 758.049 son hombres.

De ellos, la mayoría no goza de grandes recursos sino que, por el contrario, sus ingresos son bastante menores en comparación con los créditos que les otorgan las entidades comerciales, señaló el senador Letelier. Ello ha llevado a que, en varias oportunidades, adultos mayores pierdan el dominio de sus bienes.

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