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Evite esa caída ¿Pueden hacer ejercicios?
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Julio Acosta Urbaneja y Rosa Barbella Aponte, EL UNIVERSAL
April 18, 2011
La Sociedad Americana de Geriatría (AGS) y su homólogo Británico (BGS), actualizaron en enero 2011 sus directrices sobre la prevención de caídas en la gente mayor.
Todas las prácticas de salud para los abuelitos deben incluir pruebas de preparación para las caídas y su prevención, entrenamiento y evaluación en temas como manejo del miedo a caerse, cuidado de los pies y calzado, y preservar la capacidad de llevar a cabo las actividades diarias.
"El problema de las caídas en los ancianos, es uno de los más comunes y discapacitantes en salud, el cual compromete la independencia funcional", expresó la doctora María E. Tinetti, de la escuela de medicina de Yale, New Haven, Connecticut, Estados Unidos.
"Dada su frecuencia y consecuencias, sus secuelas son tan graves como las propias de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares", dijo la especialista.
Interesante es conocer que una de las conclusiones de la cita, estima que todas las intervenciones multifactoriales siempre deben incluir un componente de trabajo físico, tal como la gimnasia, el tai-chi, yoga, terapia física, u otros ejercicios lentos, para mejorar el equilibrio y la marcha.
Finalmente, el entrenamiento de resistencia y flexibilidad es considerado como fundamental, y nunca se puede desligar de los ejercicios de fuerza, imprescindibles para la estabilidad del aparato locomotor.
Algunas mujeres que inician la dulce espera tienen dudas sobre la conveniencia de mantener la actividad física de costumbre o, simplemente, dejarla por miedo a la pérdida del bebé, sin embargo, no tienen que dejar de practicar su rutina, sólo modificarla, es la respuesta.
En EEUU, de tres a cuatro 4 embarazadas no realizan entrenamiento alguno. En Europa la situación es algo diferente, se estimula a las mujeres a mantenerse en forma.
La realización de ejercicios presenta beneficios tanto para la madre como para el bebé, más aún para aquellas primerizas.
Caminar durante 30 minutos diarios, nadar, yoga y pilates, son algunas de las actividades físicas recomendadas que pueden realizar aquellas mujeres que no están acostumbradas.
El incremento de la respiración y de la frecuencia cardíaca estimula el transporte de oxígeno y elementos nutricionales al bebé, y así será un niño más fuerte, así mismo, el parto más sencillo, inclusive con menos dolor, ya que se han preparado los músculos pélvicos para el gran acontecimiento.
No deje de mejorar su vida y la de su bebé, puede hacer ejercicios, recordando beber mucha agua, usar ropa adecuada, hacerlo en sitios frescos, detenerse si ve que algo anormal está sucediendo.
No olvide consultar a su médico de confianza antes de iniciar un plan de trabajo físico.
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