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Algunas Muertes y Discapacidades de Adultos Mayores pueden ser Evitadas con Vacunas
El Tiempo
Colombia
Septiembre 14, 2004
El tétanos, la influenza, el neumococo y la difteria son las enfermedades más graves.
Por su ubicación, forma de vida o trabajo, las personas pueden estar más o menos expuestas a diferentes enfermedades propias de las epidemias.
Pero, a diferencia de los niños, los adultos mayores deben consultar con su médico sobre los planes de vacunación a los que deben someterse con el fin de prevenir enfermedades que para ellos pueden ser fatales, como la influenza o el neumococo.
Por otra parte, infecciones como la varicela o la rubéola no son necesarias en ellos ni en el resto de la población adulta, siempre y cuando estén seguros de que ya padeció de alguna de ellas.
En los adultos mayores son especialmente graves la influenza, el neumococo, el tétanos y la difteria. Sin embargo otras como la hepatitis A y B, la enfermedad de Lyme, el sarampión, la polio, la varicela, las paperas y la haemophilus influenzae tipo b pueden prevenirse en los adultos mayores a través de las vacunas.
Los Centros de control y prevención de enfermedades (CDC), organización estadounidense líder en la protección en salud, describe así las características y los cuidados que deben tenerse en cuenta en influenza, difteria, neumococo y tétanos para que los adultos mayores no se incapaciten ni mueran por causa de alguna de ellas.
Influenza: es considerada como altamente infecciosa y sus síntomas son tos seca, nariz mocosa y dolores del cuerpo, cabeza y garganta. Se transmite con el aire o a través de una persona infectada, luego cualquier persona, después de los 6 meses de edad, debe vacunarse.
¿Quién la necesita preferiblemente? Mayores de 65 años o adultos con trastornos de salud crónicos, con baja resistencia a las infecciones o que estén expuestos a personas portadoras del virus, como es el caso de los docentes.
Difteria: es una enfermedad respiratoria causada por las bacterias y cuya aparición produce dolor de garganta y fiebre baja. Consiste en la obstrucción de las vías respiratorias y su peligro radica en que, si no es tratada a tiempo, el paciente mayor puede entrar en coma y morir.
¿Quién la necesita preferiblemente? Si el adulto nunca ha recibido la dosis inicial de tres inyecciones o un refuerzo en 10 años, debe vacunarse.
Neumococo: es un tipo de bacteria que produce en el adulto mayor neumonía neumocóccica, con fiebre alta, tos y punzadas en el pecho, así como neumonía bacteriana y meningitis. Su vacunación es clave para personas mayores de 65 años, ya que previene enfermedades, aunque no elimina necesariamente todos los síntomas.
¿Quién la necesita preferiblemente? Mayores de 65 años o adultos con problemas crónicos de salud y baja resistencia a infecciones.
Tétanos: se trata de una bacteria que ataca directamente el sistema nervioso. Produce trismo (dificultad para abrir la boca), rigidez en cuello y abdomen y dificultad para tragar. Más adelante, el paciente experimenta fiebre, presión arterial elevada y espasmos musculares severos. A una tercera parte de las personas mayores de 50 años que la padecen puede conducirla a la muerte.
¿Quién la necesita preferiblemente? Todo el mundo necesita protección contra esta enfermedad. Pero si el adulto mayor no ha recibido nunca una dosis inicial de tres inyecciones o lleva 10 años sin recibir refuerzos, debe ser
vacunado.
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