Cada viernes, 60 jubilados entre 50 y 70 años van a las canchas de la Brigada Galápagos para mover las piernas, los brazos, la cabeza....al ritmo del reggaetón, la cumbia, el techno y la música nacional.

Ellos detestan que los traten como la tercera edad o peor que les digan ancianos. "Somos adultos mayores. Esta etapa es linda porque es como volver a ser niños. La diferencia es que somos unos niños con experiencia", afirma Leonor de Cabezas. 

Desde hace tres meses, los aeróbicos empiezan a las 09:00. Todos llegan puntuales y su 'look' es homogéneo: gorras, zapatillas, pantalón de algodón y camiseta. 

La instructora de la rutina de ejercicios, Patricia Estrada, y Freddy Jara, coordinador de las actividades físicas en la Brigada, los esperan con los parlantes instalados, radio y botellones con agua. También están dos médicos quienes les revisan la presión y el pulso antes y después de los aeróbicos.

"El programa es gratuito. El ejercicio disminuye el riesgo de depresión y estrés. Trabajar con ellos es distinto. Son alegres. A veces llegan con sus familiares quienes se unen a la rutina", cuenta Jara.

El viernes pasado, la música techno se escuchaba desde temprano en la cancha cubierta de un césped suave y húmedo. Esa es la señal de que los aeróbicos empezaron. Al son de ritmos electrónicos, los jubilados movieron los brazos, luego las piernas, las caderas... Después se sentaron, tocaron las puntas de los pies con las manos. 
"Vamos. Eso es, muy bien. Por favor haga los ejercicios con ritmo", alentaba Estrada.

Durante una hora la rutina estuvo intercalada con movimientos para relajar los músculos. Algunos terminaron cansados y otros con deseos deseguir ejercitándose.

"El viernes es mi favorito. Me gustaría hacer ejercicio todos los días. Mi rutina consiste en arreglar la casa, leer, cocinar, mirar la televisión y caminar cerca de la casa. No cuido a mis nietos y bisnietos. Ellos tienen a sus padres. Yo quiero disfrutar cada día", dijo Elsa Rivera, de 75 años.

Su amiga, María Gallegos, ex secretaria, soltera y de 70 años, aseguró que asistir a los aeróbicos es una motivación. "Acá se comparte con otras personas. Me encanta bailar. La otra vez hicimos los aeróbicos con la canción La Gasolina. Hay que disfrutar esta etapa y sentirse orgullosa de las canas. Nunca he tratado de ocultarlas".

Luis Flores, de 75 años, en cambio aseguró que "mover el esqueleto" le ayuda a olvidarse de los problemas. "Esto me quita el estrés. Uno llega a esta edad y atraviesa muchas cosas. Las pensiones son escasas y no alcanzan".

El viernes, todos fueron revisados por los médicos José Quito y Marcelo Merizalde. "Algunos son hipertensos. Pero hasta el momento no hemos tenido contratiempos", aseguró el Merizalde.

En las próximas semanas, el grupo preparará una coreografía que será presentada durante las fiestas del cuartel, en abril. Todos están animados. Carmita Ermida, de 68 años, ya sugirió la canción: La Camisa Negra.
Un servicio gratuito

Los jubilados no sólo realizan aeróbicos. Cada semana se varía la actividad con caminatas y natación en la piscina de la Brigada. La revisión médica es gratuita.

La Brigada firmó un convenio con la Federación Deportiva de Chimborazo. Estrada es una deportista que practica tiro. Ella da clases a cambio de un instructor.

Los interesados pueden acercarse a la Brigada. El contacto es el capitán Freddy Jara.