Seguir la vida con sida ya no es un desafío
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3 de junio de 2011
Mundo
Desde que se descubrió la enfermedad, hace 30
años, han muerto 25 millones de personas.
Envejecer con
sida es algo que las generaciones que contrajeron la enfermedad no
consideraban en los años 80 y 90. Pero hoy, contra todos los
pronósticos de entonces y a pesar de que todavía no
existe una cura, este mal ha pasado de ser sinónimo de una
muerte segura a poder ser controlado gracias a nuevos tratamientos.
Sin embargo, esto ha hecho más fuertes los problemas
económicos y de salud de aquellos que, tras ser portadores del
Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), desarrollan la enfermedad.
El sida, descubierto el 5 de junio de 1981, casi mató a Lou
Grosso hace 30 años. Pero a lo que no estaba preparado este
estadounidense es al último parte de su médico: tiene
problemas cardíacos. Con 57 años, Lou también
sufre dolores en las articulaciones y pérdida de memoria. De los
14 medicamentos que toma a diario, sólo tres son para luchar
contra su condición de seropositivo.
“Siempre les digo a mis médicos: ustedes se preocupan por el
VIH, pero yo moriré de un ataque al corazón.
Esto me preocupa, tengo una vida agradable, no tengo ganas de morir
porque mi cuerpo piense que tengo 80 años”.
En los últimos años, la atención ha estado
centrada en luchar contra los estragos que provoca la epidemia en
África, pero hoy los especialistas se preocupan por esta nueva
crisis del VIH.
Sucede que con la creación, hace 15 años, de los
antirretrovirales y de la triple terapia, una generación de
personas portadoras del virus sobrevivió y envejeció. El
problema es que sus complicaciones de salud son inéditas,
así como los efectos de la enfermedad a largo plazo y los
problemas financieros que no pensaban llegarían a enfrentar.
Lou Grosso, pionero en la programación de aplicaciones
informáticas en los años 80, aún se sorprende por
haber vivido suficiente para ver nacer los sitios web. Hoy, su
preocupación es sentirse con un espíritu menos vivaz y
con pérdidas de memoria a corto plazo.
Un estudio reciente reveló que el 52 por ciento de los
estadounidenses seropositivos padecen disturbios cognitivos, contra el
10 por ciento entre los seronegativos.
Según una investigación de la American Academy of HIV
Medicine, además, los portadores de VIH mayores de 55
años tienen tres veces más posibilidades de sufrir una
enfermedad crónica, como osteoporosis, diabetes o cáncer,
que las personas seronegativas de 70 años.
OTRO PERFIL
Hoy, no sólo ha cambiado el perfil de los portadores de la
enfermedad (antes era exclusivo de homosexuales y prostitutas, y ahora
cualquier persona, incluidos niños, puede infectarse). Al
comienzo de la epidemia, los pacientes del servicio del doctor Brad
Hare, que atiende a Lou Grosso, en el Hospital General de San Francisco
(California), morían muy jóvenes.
Actualmente, más de una cuarta parte superan los 50 años,
según el Centro de Control y de Prevención de las
Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, y la edad promedio de las 3.000
personas atendidas por el servicio del Dr. Hare es 47 años.
“Los pacientes dicen que los agota: luchamos contre el VIH durante 30
años, logramos controlarlo y ahora aparece una nueva
batería de problemas de salud”, explica el médico.
Los científicos apenas empiezan a examinar el origen de estos
nuevos problemas, para determinar si están vinculados con la
enfermedad misma o con los medicamentos, o si son simples
señales que aparecen con la edad.
Pero el combate de quienes envejecen con el sida va más
allá de estas complicaciones.
Los médicos también se preocupan por pacientes como Vicky
Davidson, quien, deprimida por un largo invierno solitario, estuvo a
punto de dejar el tratamiento contra el sida.
Contaminada en 1986 durante una transfusión sanguínea,
fue operada dos veces de la cadera a los 50 años y sufre de
fatiga crónica. Y lo que más la entristece es su
aislamiento social.
“No quiero que la gente piense que soy una llorona, entonces hago de
cuenta que no es grave, pero en los momentos de soledad,
necesitaría tener un compañero”, afirma.
El asunto financiero también es crucial para quienes no
esperaban vivir tantos años. Homer Hobi, de 65 años,
cuenta que hace poco encontró trabajo en una agencia
inmobiliaria. En los años 90 había legado su casa, su
empresa y buena parte de sus ahorros a su ex mujer, pese a la
oposición del abogado que se encargó de su divorcio.
“Ni un solo médico de los que me atendieron en ese entonces
imaginaba que seguiría con vida 10 años más tarde”.
ALGUNOS DATOS
El Sida es causado por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que
sobrevive con dificultad fuera del cuerpo humano.
El sida es la primera casa de defunción en África, el
continente con mayor numero de infectados y con más nuevos casos
de contagio.
La ONU ha alertado que el contagio está aumentando en Europa
Oriental y en Asia Central debido al uso de drogas inyectables.
En Colombia, a finales del año del 2010 se registró un
total de 76.891 casos de personas infectadas con el Virus de
Inmunodeficiencia.
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