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Para lograr el pleno ejercicio de los derechos mayores
El Argentino - Nota - Información General
28 de Mayo 2009
Argentina
Argentina fue sede de un encuentro de países de la región en el que se
repasaron políticas para adultos mayores, para que haya igualdad sin
discriminación, al margen del origen socioecónimo o étnico.
La Argentina vuelve hoy a ser un activo protagonista en la concepción,
garantía y ejercicio de los derechos universales de las personas mayores.
No sólo por su condición de país sede para la “Segunda Reunión de
Seguimiento de la Declaración de Brasilia”, sino por la decisión del
Gobierno nacional, a través del Ministerio de Desarrollo Social, para
consagrar tales reinvidaciones y facultades. Para eso, el 21 y 22 de mayo,
en el Palacio San Martín, sede de la Cancillería, se reunieron
representantes de 22 países de la región, bajo la coordinación de ese
Ministerio y el de
Desarrollo Social, en el que se analizó la problemática de los adultos
mayores.
El antecedente de 1948, impulsado por Eva Perón, renació en espíritu y práctica
por la atención de las personas mayores, entiéndase por ellos a todos los
hombres y mujeres mayores de 60 años.
En diálogo con El Argentino, Marcela Paola Vessvessian, titular de la
Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de
Desarrollo Social, definió al encuentro como “histórico”, dado que
“la primera vez que se plantearon a nivel internacional los derechos de la
ancianidad fue en 1948, a iniciativa de Eva Duarte de Perón, en la reunión
de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Cincuenta y un años después,
la Argentina se encuentra liderando este proceso nivel mundial” y la nómina
de delegaciones que llegaron a esa cita en nuestro país es más que
elocuente, participaron representantes de Alemania, Bolivia, Brasil, Chile,
Colombia, Cuba, Ecuador, Estados Unidos, España, Holanda, Mali, México,
Antillas Holandesas, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República
Dominicana, Surinam, Uruguay y Costa Rica.
“Se acordaron los ejes rectores en la futura convención: el respeto de la
dignidad inherente, la independencia de la persona de edad, incluyendo la
libertad de hacer sus propias elecciones, y conservar su autonomía
individual; la no discriminación por edad ni por ningún otro atributo de
la persona”, agregó.
“También la plena y efectiva participación e inclusión en la sociedad;
la igualdad de oportunidades; accesibilidad e igualdad de género; el
respeto y la atención de los derechos y necesidades especiales de las
personas de edad de todas las culturas y origen étnico; el reconocimiento
de que existen lazos y obligaciones mutuas entre las personas,
independientemente de su edad, por el hecho de ser miembros de una misma
comunidad política”, detalló la funcionaria.
En el mismo sentido hubo acuerdo de todas las naciones sobre contenidos mínimos
para futuros encuentros. Ellos son: igualdad y no discriminación, pleno
ejercicio de derechos entre hombres y mujeres, concientización; derecho a
la vida.
Y se acordó también un plano de relevancia para las emergencias
humanitarias, con igualdad ante la ley, acceso a la justicia, libertad y
seguridad personal; prevención contra la tortura y los tratos o penas
crueles, inhumanas o degradantes; contra la explotación, la violencia, el
abuso y los malos tratos además de la protección de la integridad de las
personas de edad.; No quedó sin atención lo referido al ejercicio de
facultades individuales como la libertad de expresión y de opinión, el
acceso a información, el respeto de la privacidad; al hogar y de la
diversidad de formas de familia. Lo mismo que la educación, salud, trabajo
y empleo, garantía de ingresos, seguridad social y jubilación, su atención
prioritaria, el otorgamiento de un nivel de vida y protección social
adecuados.
No es un dato menor considerar también la participación en la vida política
y pública, en la vida cultural, la recreación, su tiempo para el ocio y el
deporte.
La organización del encuentro reciente estuvo a cargo del Ministerio de
Desarrollo Social y el de Relaciones Exteriores, con el apoyo de la
Organización Panamericana de la Salud y el Centro Latinoamericano y Caribeño
de Demografía (Celade) - División de Población de la CEPAL. También
colaboraron los ministerios de Salud y Justicia, el Instituto Nacional de
Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, el Fondo de Población de
la Naciones Unidas y la Universidad Nacional de Mar del Plata. La próxima
reunión tendrá lugar en Chile a fin de año.
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